¿Por qué existo yo? ¿Por qué existe el mundo? ¿Por qué existe el universo?.. Yo existo porque pienso. Yo soy pensamiento. Pensar es ver, oír, sentir, oler y gustar. Mi pensamiento es un centro receptor y transmisor de vibraciones. Mi pensamiento es Dios. Las vibraciones son ondas que suben, bajan y se desplazan. Veo vibraciones tan bruscas como el universo; y siento vibraciones tan sutiles como el amor. La luz, la oscuridad y los colores que veo, «no existen», son vibraciones que capta mi pensamiento. El ruido no se hace, el ruido son vibraciones de choque. Lo que toco son vibraciones muy bruscas y no existen más que en mi pensamiento. El olor y el gusto, son vibraciones de menos importancia. ¿Por qué existe todo? lo que existe es materia; pero, la materia son sólo vibraciones; algunas tan bruscas, como el acero; y otras muy sutiles, como la electricidad. Todo existe, porque hay un «pensamiento» dador y recibidor de vibraciones. Esto es, los cinco sentidos del ser humano.
Los OVNIS son vibraciones muy sutiles que nos están llegando de otros mundos. Marte es un planeta con sus vibraciones muy diferentes a las nuestras. Allá también hay «centros receptivos», como lo somos nosotros, pero con diferentes vibraciones, por eso no los podemos ver, ni oír, ni tocar. Nosotros, de acuerdo con nuestro modo de recibir las vibraciones, ya hemos captado algo de sus pensamientos. Y, así mismo, ellos, en la luna y en Marte, por medio de nuestros artefactos mandados allá, y que no son sino pensamientos convertidos en materia, ya han captado, nuestra presencia entre ellos.
En Marte hay mucha gente, y muchos edificios, y muchas cosas que para nosotros serían muy raras; pero, como sus vibraciones son diferentes a las nuestras, no las podemos captar; y por lo mismo, nada vemos, nada oímos, nada sentimos. Los planetas sí los vemos, por que están formados con las mismas y vibraciones con que Dios hizo todas las galaxias. Y así como nosotros vemos a la Luna y a Marte, así los lunáticos y los marcianos nos ven a nosotros: sólo un mundo hecho de tierra y piedras; y ni nos ven, ni nos oyen, ni nos sienten.
El pensamiento, o sea el ser humano, se compone de vibraciones bruscas y vibraciones sutiles; las fuertes hacen la «materia», las sutiles hacen el «espíritu». Las vibraciones sutiles están actuando en nuestro pensamiento, por eso pensamos que existen los ovnis. Las personas que los han visto, es porque han captado sus vibraciones, por eso «piensan.» que los han visto. Si esas vibraciones se adaptaran a las nuestras, podríamos verlos, oídos y tocarlos.
Los espíritus, son pensamientos con vibraciones muy sutiles, que no se han podido acoplar a las vibraciones de la materia, porque no hemos aprendido a dominarlas. Los «seres extraterrestres», son espíritus con la misma intensidad que nuestro espíritu, pero, «la materia» que nos domina, no nos deja conocer ni a nuestro propio espíritu.
Yo existo, porque en mi cuerpo hay pensamientos con vibraciones bruscas. Y, yo soy, porque en mi espíritu hay pensamientos con vibraciones sutiles. La muerte de nuestro cuerpo, es el final de las vibraciones bruscas. Si lográramos dominar esas vibraciones, podríamos vivir eternamente; pero, las vibraciones sutiles no nos lo permitirían; porque, esa es la voluntad de Dios
Prof.. Eladio Alvarado Ávila.
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